Descripción general de EPI
La insuficiencia pancreática exocrina (EPI) ocurre cuando el páncreas no puede producir o liberar suficientes enzimas digestivas para descomponer los alimentos y absorber los nutrientes. La digestión de grasas es la que más se ve afectada. A medida que su cuerpo intente expulsar la grasa parcialmente digerida, su intestino se sentirá molesto.
Es probable que experimente síntomas como hinchazón, flatulencia, dolor abdominal y diarrea. La EPI grave puede provocar pérdida de peso, diarrea grasa y desnutrición.
La EPI es poco común y sus síntomas y causas fundamentales se superponen con otros trastornos digestivos. Por estas razones, puede pasarse por alto durante el diagnóstico.
¿Cuáles son los síntomas de la EPI?
Los síntomas de EPI se superponen con otras afecciones que afectan el sistema digestivo. Éstos incluyen:
- enfermedad celíaca
- síndrome del intestino irritable
- Enfermedad de Crohn
- colitis ulcerosa
- Cancer de pancreas
Los síntomas de la EPI a menudo pasan desapercibidos. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:
- dolor de estómago
- pérdida de peso debido a la desnutrición
- síntomas de deficiencia de vitaminas, como problemas de visión, espasmos musculares y osteoporosis
- heces anormalmente grasas y voluminosas debido a la reducción de la absorción de grasa en el intestino
- Diarrea
El páncreas
El páncreas es un órgano de aproximadamente 6 pulgadas de largo ubicado detrás de su estómago. Tiene dos funciones principales: producir hormonas y productos químicos digestivos.
Como parte del sistema endocrino, el páncreas produce hormonas, como la insulina, que ayudan a controlar el azúcar en sangre. El páncreas también juega un papel importante en su sistema digestivo al liberar sustancias químicas que ayudan a digerir los alimentos.
Cuando las enzimas del páncreas ingresan a la parte superior del intestino delgado, descomponen las proteínas, las grasas y los carbohidratos en formas que su cuerpo puede absorber. Esto se conoce como función exocrina del páncreas.
¿Cómo se trata la EPI?
Si le diagnostican EPI, su tratamiento se centrará en aliviar sus síntomas y ayudar a su cuerpo a absorber los nutrientes normalmente.
Cambios en la dieta y el estilo de vida.
El tratamiento a menudo requiere una combinación de dieta y otros cambios en el estilo de vida para fomentar una digestión más suave. Esto significa llevar una dieta sana y equilibrada, que contenga las grasas adecuadas y no incluya otras cosas, como alimentos ricos en fibra.
Medicamentos y suplementos
También es posible que deba tomar suplementos vitamínicos porque la EPI dificulta que su cuerpo absorba ciertas vitaminas. Su médico puede recetarle suplementos de enzimas para reemplazar los que su páncreas no produce.
¿Qué causa la EPI?
Cualquier cosa que interrumpa el proceso normal de las enzimas digestivas que salen del páncreas puede causar EPI. Hay una variedad de condiciones que pueden crear esa interrupción.
La pancreatitis que no mejora con el tiempo y la fibrosis quística son las causas más comunes. Otras afecciones que causan EPI pueden ser hereditarias, causadas por otros trastornos intestinales o ser el efecto secundario de una cirugía.
Condiciones asociadas con EPI:
- fibrosis quística
- Pancreatitis crónica
- cirugía de páncreas o estómago
- diabetes
- enfermedad celíaca
- enfermedades inflamatorias del intestino como la enfermedad de Crohn
- pancreatitis autoinmune
- Cancer de pancreas
- Síndrome de Zollinger-Ellison
Factores de riesgo
La EPI se asocia comúnmente con otras afecciones. La mayoría de las personas con pancreatitis crónica desarrollan EPI. El consumo excesivo y continuo de alcohol aumenta las posibilidades de desarrollar pancreatitis continua. La pancreatitis crónica también puede ser hereditaria. En otros casos, no hay una causa conocida de pancreatitis en curso.
La fibrosis quística es una afección hereditaria, por lo que si usted es portador del gen, es más probable que sus hijos lo tengan.
¿Cómo se diagnostica la EPI?
Dado que los síntomas de la EPI son similares a los de otras afecciones digestivas, no existe un síntoma único que confirme un diagnóstico de EPI. Es probable que su médico use una variedad de técnicas para diagnosticar EPI y detectar sus causas subyacentes.
Historia y examen físico
A veces, los médicos diagnostican EPI grave según su historial médico y la presencia de varios síntomas característicos, como heces grasas, diarrea y pérdida de peso.
Pruebas de imagen
Las pruebas de diagnóstico por imágenes, que incluyen rayos X, tomografía computarizada o resonancia magnética, ayudarán a su médico a buscar evidencia de daño en el páncreas.
Prueba de laboratorio
Las pruebas de laboratorio comprobarán la cantidad de grasa en las heces para ver si no se digieren correctamente. Una prueba de aliento mide la digestión de las grasas indirectamente al buscar ciertos químicos al exhalar.
Prueba de condiciones relacionadas
Se le realizarán pruebas adicionales para ver si una afección relacionada, como pancreatitis o diabetes, es la causa principal de su EPI.
¿Se puede prevenir la EPI?
A menudo, no hay forma de prevenir la EPI, especialmente si es el resultado de una afección hereditaria como la fibrosis quística. Para disminuir su probabilidad de desarrollar pancreatitis y EPI asociado, evite el consumo excesivo de alcohol, coma una dieta balanceada y evite fumar.
panorama
Solo alrededor de la mitad de las personas con insuficiencia pancreática exocrina tienen niveles normales de digestión de grasas. La insuficiencia pancreática exocrina grave puede ser especialmente difícil de resolver.
Si tiene síntomas que sugieran EPI, discútalos con su médico. Los síntomas pueden ser un signo de afecciones subyacentes como pancreatitis o diabetes.
El tratamiento de la EPI es importante porque puede mejorar su calidad de vida, prevenir un daño mayor al páncreas y prevenir complicaciones graves por desnutrición. Seguir su plan de tratamiento y los cambios positivos en el estilo de vida pueden mejorar sus posibilidades de volver a una digestión normal y mejorar su calidad de vida.