Un tratamiento de conducto puede dejar la boca entumecida y sensible. Si fuma, puede preguntarse si es seguro hacerlo después del procedimiento.
Después de un tratamiento de conducto, no solo se está recuperando de un procedimiento oral, sino que también es más vulnerable a desarrollar otras afecciones de salud bucal si fuma.
Evitar fumar puede conducir a una mejor salud bucal, así como a reducir la probabilidad de contraer endodoncias.
Por qué no debería fumar después de un tratamiento de conducto
Hay muchas razones por las que debe evitar fumar después de un tratamiento de conducto:
- En primer lugar, los efectos del tabaquismo pueden aumentar la probabilidad de que le practiquen un tratamiento de conducto.
- En segundo lugar, su cuerpo se recuperará después del procedimiento y fumar puede retrasar su curación.
- En tercer lugar, no existen productos de tabaco respaldados o aprobados por la Asociación Dental Estadounidense, ya que fumar no se considera saludable para su cuerpo y, en particular, su salud bucal.
Otros factores a considerar
Fumar en general no es bueno para la salud bucal, pero puede dejarlo especialmente propenso a las endodoncias.
Una revisión de 2020 encontró que los fumadores de tabaco tienen una mayor probabilidad de tener un tratamiento de conducto. Un estudio anterior encontró que los fumadores de cigarrillos tenían 1,7 veces más probabilidades de someterse a un tratamiento de conducto que los no fumadores. Este número disminuyó en las personas que dejaron de fumar.
Es posible que sea más susceptible a complicaciones después de su tratamiento de conducto si fuma. Fumar puede causar inflamación. Su cuerpo es menos capaz de combatir las infecciones y correrá el riesgo de desarrollar una después de este procedimiento. Fumar también contribuye a la pérdida de masa ósea, disminuye la forma en que la sangre transporta oxígeno y conduce a la disfunción de los vasos sanguíneos.
Después de su procedimiento, su boca estará adormecida y se recuperará. Una boca entumecida puede hacer que se muerda la mejilla, la lengua o los labios. También es posible que necesite medicamentos para el dolor, que pueden no ser compatibles con fumar.
¿Cuánto tiempo debe esperar para fumar después de un tratamiento de conducto?
No existen pautas específicas sobre cuánto tiempo debe esperar para fumar después de un tratamiento de conducto. Tenga en cuenta que su boca estará entumecida y sensible después del procedimiento.
Siga las instrucciones de su médico sobre cuándo puede participar en actividades relacionadas con la boca. Por ejemplo, probablemente deba esperar hasta que desaparezca el entumecimiento para masticar alimentos en el área de la boca donde se realizó el tratamiento de conducto.
Si ha estado pensando en dejar de fumar, ahora podría ser un buen momento para tomar las medidas necesarias.
Alternativas al tabaquismo
Fumar es adictivo y habitual, por lo que puede resultar difícil dejar de hacerlo. Hay varios comportamientos que puede intentar para retrasar la necesidad de fumar. Algunos incluyen:
- Ocuparse cuando siente la necesidad de fumar, como participar en un pasatiempo, caminar alrededor de la cuadra o realizar una tarea doméstica.
- Masticar chicle o chupar caramelos o pastillas sin azúcar para estimular su boca cuando normalmente fumaría.
- Beber un vaso de agua.
- Hacer ejercicio, como caminar, correr, nadar o practicar deportes.
- Concéntrese en su respiración respirando profundamente y prestando atención a sus inhalaciones y exhalaciones.
Fumar y problemas dentales
El tabaquismo y el consumo de tabaco generalmente están relacionados con muchos problemas dentales. Esto se debe a que su boca está llena de tejido vivo y el acto de fumar y los químicos en los productos de tabaco la atacan. Esto puede causar:
- enfermedad de las encías
- caries
- acumulación de sarro
- moviendo los dientes
También contribuye al mal aliento y a las manchas dentales.
Puede desarrollar enfermedad de las encías si fuma. El consumo de tabaco afecta el flujo sanguíneo a las encías, lo que bloquea los nutrientes y el oxígeno en la boca y causa complicaciones. Fumar también debilita el sistema inmunológico de su cuerpo, lo que lo hace menos capaz de combatir las infecciones de las encías y curarse del daño de las encías.
También corre el riesgo de desarrollar cáncer oral si fuma.
Cuando ver a un dentista
Debe consultar a un dentista al menos dos veces al año, independientemente de si fuma. Asegúrese de hablar sobre sus hábitos de fumar con su dentista para que pueda detectar cualquier problema y brindarle asesoramiento si desea dejar de fumar.
Consulte a un dentista si sospecha que necesita un tratamiento de conducto. Si su diente le duele, se siente más sensible de lo normal, se agrieta o desarrolla un grano en las encías cerca de un diente, es posible que necesite un tratamiento de conducto. Las encías descoloridas también pueden ser un síntoma.
Recursos y apoyo
Dejar de fumar puede reducir la probabilidad de que desarrolle muchas afecciones dentales. Puede ser difícil dejar el hábito porque fumar es adictivo. Pero es posible.
Dónde encontrar apoyo
- Su dentista o médico puede aconsejarle sobre los métodos para dejar de fumar, o puede optar por hacerlo por su cuenta.
- Su médico puede recomendar ciertos productos que brindan una dosis baja de nicotina durante un período de tiempo durante el proceso para dejar de fumar. Sin embargo, tenga en cuenta que estos productos de nicotina aún pueden afectar su salud bucal.
- Es posible que un terapeuta pueda ayudarlo a descubrir por qué fuma y si hay comportamientos que pueda cambiar para reducir sus antojos.
- Busque el apoyo de sus seres queridos que le ayuden a dejar de fumar.
- También considere reducir sus niveles de estrés para evitar la necesidad de volver a empezar. Puede ser beneficioso establecer un sistema de recompensas con usted mismo que marque la cantidad de días que han pasado desde que fumó.
Recursos a considerar
Hay muchos recursos disponibles para ayudarlo a dejar de fumar y continuar viviendo libre de humo. Aquí hay algunos para comenzar:
- ayuda de mensajería de texto
- servicios telefónicos, como 1-800-QUIT-NOW
- soporte de redes sociales
- grupos de apoyo
La línea de fondo
No existen reglas estrictas sobre fumar después de un tratamiento de conducto. Pero fumar no es beneficioso para la salud bucal y puede aumentar los riesgos de endodoncia y otras afecciones bucales.
Fumar lo hace más propenso a la inflamación y la infección, que pueden ocurrir después de un tratamiento de conducto. Tendrá la boca adormecida y adolorida después del procedimiento, por lo que es posible que no sea conveniente fumar.
Dejar de fumar puede mejorar su salud en general. Si está considerando dejar de fumar, puede discutirlo con su médico.