Las familias mixtas son cada vez más comunes
Si se va a casar y su pareja tiene hijos de su matrimonio anterior, esto significa que su familia está a punto de fusionarse. Una familia mixta a menudo incluye a un padrastro, un hermanastro o un medio hermano, y también es posible tenerlos a todos.
Y si está descubriendo estas nuevas dinámicas familiares, no está solo. Según el censo de EE. UU., El 16 por ciento de los niños viven en una familia mixta a partir de 2009.
También existe la posibilidad de que este número sea mayor. El censo de los EE. UU. Se realiza cada 10 años y también se forman 1,300 nuevas familias reconstituidas cada día. (Nota: no todas las familias reconstituidas se mezclan, ya que un padrastro sin hijos no constituiría una familia combinada).
Cuando se trata de crecer o formar una familia mixta, habrá desafíos. Ya sea que se trate de una nueva dinámica familiar para navegar, como la crianza compartida con ex parejas, convertirse en padrastro o madrastra o dejar que los nuevos hermanos se unan, una de las mejores maneras de navegar estos desafíos es prepararse para ellos.
A continuación, le mostramos cómo planificar con anticipación cuando se trata de comunicarse, navegar y hacer crecer su familia combinada.
5 desafíos comunes que enfrentará una familia mixta
1. Mezcla de diferentes tradiciones familiares
Cuando dos hogares se fusionan, todos vendrán con tradiciones diferentes. Antes de hablar con sus hijos, asegúrese de hablar con su pareja sobre lo que es importante y lo que puede comprometerse.Nunca asuma los sentimientos de su pareja, sus hijos o los hijos de su pareja.
Los niños, especialmente, pueden tener diferentes expectativas en torno a las vacaciones y los cumpleaños. Sin la presentación o preparación adecuadas, pueden sentirse resentidos por tener que seguir la forma de celebrar de otra persona.
Trate de comprometerse, divida el tiempo equitativamente entre los padres y cree nuevas tradiciones juntos como una familia combinada.
Consejos para las vacaciones
- Planifique lo antes posible con sus ex parejas, la familia extendida y todos los involucrados sobre cómo pasarán sus hijos cada día festivo. Trate de mantener las cosas lo más simples posible. La comunicación es clave aquí.
- Se Flexible. Puede dejar que sus hijos pasen el Día de Acción de Gracias con su ex, pero la Navidad o su cumpleaños con usted.
- Planee darles a sus hijos y a sus hijastros la misma cantidad o tipo de obsequios en cada día festivo.
- Inicie una nueva tradición que sepa que su familia mezclada disfrutará.
2. Ayudar a los niños a adaptarse al cambio
Demasiados cambios a la vez pueden ser inquietantes. Los niños prosperan con la rutina, así que establezca un horario y cúmplalo tanto como sea posible. Tener expectativas claras y delinear cómo serán sus semanas escolares (el lunes estarás con tu mamá, el martes papá te recogerá, por ejemplo) ayudará a tus hijos a adaptarse.
Para los niños mayores, establezca conversaciones antes de tomar decisiones para que sientan que tienen albedrío o participación en lo que está sucediendo.
3. Rivalidad entre hermanos
Algunos niños estarán emocionados por tener hermanastros, mientras que otros inicialmente pueden resentirlo. Los celos y los conflictos pueden surgir rápidamente en la transición a la convivencia.
Puede ayudar a facilitar la transición al:
- establecer expectativas y reglas sobre el respeto a cada miembro de la familia
- publicar las reglas de la casa que se aplican a todos los miembros de la familia en algún lugar donde todos puedan verlas
- asegurándose de que todos tengan su propio espacio donde puedan estar solos cuando necesiten algo de espacio
- mostrar fotos de todos los niños de tu casa
- planificar actividades como una excursión a la playa o al parque temático que todos disfrutarán
También podría ser una buena idea probar cómo será la convivencia al irse de vacaciones. Un viaje de campamento es una excelente manera de ver cómo los hermanos interactúan entre sí.
4. Compromiso con los estilos de disciplina de los padres
Usted y su pareja pueden tener diferentes estilos de disciplina. Es posible que las reglas de su casa tampoco coincidan con las de su expareja. Es importante estar en la misma página y seguir las mismas reglas antes de casarse y vivir bajo el mismo techo.
Los siguientes pasos pueden ayudar:
- priorizar ser civilizado y respetuoso
- dejar que el padre principal siga siendo el principal discipulador hasta que el padrastro tenga vínculos sólidos con sus hijastros
- Evite los ultimátums o la disciplina cuando su pareja no esté cerca.
- Un padrastro o madrastra puede servir más como un amigo o consejero en lugar de un disciplinario.
- enumere y publique las reglas de la familia y sea coherente al seguirlas
- dejar en claro que las reglas en su casa pueden ser diferentes a las de la casa de su expareja y eso está bien
- limitar las expectativas de su pareja
5. Manejo de las diferencias de edad
Los miembros de la familia de diferentes edades y etapas tendrán diferentes necesidades. También pueden adaptarse de manera diferente a la nueva dinámica familiar.
Comprender las frustraciones y respetar las diferencias puede ser de gran ayuda en una familia mixta. Por ejemplo, no haga suposiciones ni ponga expectativas en los niños mayores para que cuiden a los más pequeños de inmediato. Primero déjelos adaptarse a la nueva dinámica familiar y pregúnteles si eso es algo que les interese.
Diferencias de edad a tener en cuenta
- Menores de 10 años. Es posible que se adapten más fácilmente, necesiten más atención de los padres y tengan necesidades diarias más básicas.
- De 10 a 14 años de edad. Pueden ser más sensibles a los sentimientos, necesitan más seguridad que los pequeños y necesitan más tiempo para vincularse.
- Mayores de 15 años. Es posible que estén menos involucrados en el tiempo en familia, es posible que no se expresen abiertamente con tanta facilidad y necesiten un sentido de agencia y respeto igualitario.
También puede ser útil pasar tiempo individualmente con sus hijos, cuando sea posible, para escuchar sus preocupaciones. Si es la primera vez que vive con los hijos de su pareja, planifique también dedicar tiempo a conocerlos individualmente.
Hablar y honrar las dinámicas de género, raciales y culturales.
Si su pareja y sus hijos tienen una educación y antecedentes muy diferentes, es mejor hablar sobre estas identidades y qué papel juegan en sus vidas y en la suya antes de mudarse juntos.
Evite el pensamiento tradicional o utilice su experiencia como modelo. Estas expectativas pueden preparar a su familia combinada para enfrentar más desafíos. Es importante reconocer que usted o su pareja no reemplazan a nadie, sino que establecen nuevas relaciones de confianza y comunicación.
Por ejemplo, si su hijastro está acostumbrado a una madre que se queda en casa, es posible que necesite más atención y orientación de una figura paterna cuando se mude por primera vez.
Aprender a comprender las diferencias raciales y culturales puede marcar una gran diferencia cuando se trata de crear lazos afectivos con su pareja y sus hijos. Para las personas de color en los Estados Unidos, los modelos representativos a seguir en su vida son particularmente importantes. Esto podría significar encontrar un médico de familia, entrenadores extracurriculares, instructores extracurriculares o incluso grupos de juego que coincidan con sus antecedentes.
Cuando se trata de estas diferentes identidades, hay algunas situaciones en las que usted o su pareja podrían no convertirse inmediatamente en el confidente de un niño en ciertas áreas, o incluso ser capaces de llegar a ese punto.
Esta dinámica no tiene por qué disminuir la relación entre usted, su pareja y sus hijos. De hecho, comprender estos matices puede ayudar a fomentar un vínculo y un respeto mutuos aún más fuertes.
Vinculación forzada vs natural
La unión como una familia mixta llevará tiempo. Incluso pueden pasar años antes de que usted y sus hijos se sientan cómodos con la nueva dinámica.
Pero evite el vínculo forzado con su familia mezclada. Está bien que sus hijos y sus hermanastros no se amen, o incluso no se agraden, entre sí de inmediato.
La vinculación es un proceso gradual que será más fácil cuando no es forzado. En lugar de crear situaciones con expectativas, primero busque formas de hacer que la vida diaria sea cómoda. Esto permitirá que los nuevos padres o niños se desarrollen en su propia línea de tiempo.
Conózcanse el uno al otro, pero no los obligue a pasar todo su tiempo con usted. Toda persona necesita un tiempo tranquilo o a solas para procesar sus experiencias antes de sentirse más cerca el uno del otro. Eventualmente, pueden calentarse más. Pero ten paciencia.
El fracaso es parte del progreso
Siempre existe la presión de permanecer juntos como familia. Ya sea que se trate de un primer matrimonio o de una familia mixta, siempre que se encuentre en una mala racha, la idea de dejarlo puede cruzarse por su mente.
Y eso es perfectamente normal.
Es lo que quiere hacer a continuación, y lo que realmente quiere, lo que importa. Si se encuentra pensando esto, pregúntese:
- ¿Se ha dado a usted y a su familia el tiempo suficiente para crecer juntos?
- ¿Están sus sentimientos basados en la inseguridad o la experiencia?
- ¿Ha hablado de sus sentimientos con su pareja o con sus hijos mayores?
- ¿Están usted y su pareja todavía comprometidos a hacer que esto funcione?
Ser una familia mixta no es una fórmula de escoger y elegir. Es mucho trabajo y comunicación y, a veces, es posible que necesite apoyo adicional de amigos, una comunidad o un terapeuta.
Es posible que deba tomar un descanso y retroceder para analizar la situación o pedir ayuda a un profesional.
Mientras usted y su pareja sigan comprometidos con la familia, todavía hay muchas formas de recuperarse de una situación tensa.
Las mejores familias se comunican
Combinar dos familias es un ajuste importante para todos. Se necesitará tiempo, compromiso y flexibilidad antes de que su familia se sienta cómoda con el arreglo.
La comunicación es clave. Deberá tener claras sus necesidades y expectativas con su pareja anterior o nueva.
Asegúrese de equilibrar su tiempo concentrándose en su familia combinada, así como en su matrimonio. Al ser testigos de su amor y respeto mutuos, los niños también reconocerán la base sana y segura que usted y su pareja están proporcionando a la familia.
Cómo comunicarse de manera efectiva
- No fuerce las conversaciones. Caerse es normal. Deje que los niños y los padres digieran sus sentimientos antes de hablar.
- Deja que tus sentimientos sean conocidos. Deja salir tus emociones pensativamente, no de forma reactiva. Si usted, su pareja o sus hijos necesitan una liberación inmediata, anote estos sentimientos y guárdelos para más tarde.
- Escuche sin interrumpir. Esto ayuda a las personas a sentirse respetadas en lugar de juzgadas. Tome notas si es necesario.
- Que todo sea una discusión. No permita que sus hijos o su pareja se sientan inseguros sobre una situación o importancia en la familia. No todas las discusiones tienen que suceder de inmediato. Si es necesario posponer una charla para más tarde, dígales a los demás por qué y cuándo puede volver a hablar sobre ella.
Si bien uno de los factores más importantes es que sus hijos y los de su pareja se sientan seguros y protegidos cuando están en su casa, recuerde que todos tienen una definición o perspectiva diferente para sentirse seguros.
La mejor manera de sentirse seguro y estable acerca de su familia combinada es fomentar una comunicación honesta y resoluciones activas.