El hígado es un órgano grande en forma de cuña que se encuentra justo debajo de la caja torácica y los pulmones. Es vital para filtrar las toxinas de la sangre, crear bilis para digerir las grasas y producir sustancias que ayudan a que la sangre se coagule.
Su hígado contiene aproximadamente 1 pinta de sangre de su cuerpo en un momento dado.Debido a su tamaño y ubicación, también es uno de los órganos más lesionados de su cuerpo, especialmente cuando se trata de traumatismos por fuerza contundente.
Siga leyendo para obtener más información sobre las lesiones que pueden surgir de un golpe o puñetazo en el hígado y cómo se tratan normalmente.
¿Qué tipo de lesiones puede causar un golpe en el hígado?
Su hígado está ubicado justo debajo de su diafragma, en el lado derecho de su abdomen. Es el órgano interno más grande de su cuerpo.
Debido a su tamaño relativamente grande y su ubicación en la parte delantera de su cuerpo, es vulnerable a lesiones, especialmente si recibe un golpe en el abdomen.
Hay una serie de causas comunes de traumatismo que pueden provocar lesiones en el hígado. Los ejemplos de traumatismo por fuerza contundente incluyen:
- un golpe o puñetazo en el área del estómago
- accidentes automovilísticos
- accidentes de peatones
- una caída
- trauma debido a un disparo o una puñalada
- accidentes industriales o agrícolas
Si experimenta un traumatismo por fuerza contundente en el hígado, puede provocar uno o más de los siguientes tipos de lesiones:
- hematoma, que se desarrolla cuando se lesiona la pared de un vaso sanguíneo, lo que resulta en una acumulación de sangre fuera de un vaso sanguíneo
- desgarro (desgarro) en el hígado, que puede ser superficial y no causar sangrado, o puede ser profundo y causar sangrado abundante
- pérdida de suministro de sangre al hígado
Categorías de lesiones hepáticas
La Asociación Estadounidense de Cirugía para Traumatismos divide las lesiones hepáticas en seis tipos de categorías o grados. Estos proporcionan una referencia rápida para ayudar a identificar qué tan grave es una lesión hepática. Cuanto mayor sea el grado, más grave será la lesión hepática.
Por ejemplo, las lesiones de grado 1 generalmente incluyen:
- un hematoma que ocupa menos de 10 centímetros de la superficie del hígado y no se extiende ni aumenta de tamaño
- una laceración de menos de 1 centímetro de profundidad y que no sangra
Por otro lado, las lesiones de grado 5 o 6 son mucho más graves y pueden incluir:
- lesiones en las venas principales del hígado que causan sangrado abundante
- una laceración profunda que altera grandes secciones del hígado
- pérdida de suministro de sangre al hígado
Afortunadamente, se estima que entre el 80 y el 90 por ciento de las personas que sufren un golpe en el hígado experimentan lesiones de grado 1 a grado 2. Los médicos generalmente pueden tratarlos con intervenciones no quirúrgicas.
En algunos casos, especialmente en el caso de lesiones que pertenecen a categorías superiores, el daño al hígado puede ser fatal.
Cuando buscar atención
Si experimenta algún tipo de trauma, como un accidente automovilístico, una caída o un golpe en el abdomen, es de vital importancia obtener atención médica de emergencia.
Incluso si no siente dolor o no siente que tiene ninguna lesión, es posible que aún tenga lesiones internas.
Un golpe en el hígado puede causar una hemorragia que tal vez no vea ni sienta. Después de un tiempo, el sangrado puede comenzar a afectar cómo se siente y su presión arterial puede bajar rápidamente. Si busca tratamiento lo antes posible, los médicos pueden trabajar para evitar que esto suceda.
Incluso si cree que un golpe en el hígado no le causó ningún daño, hay señales que debe tener en cuenta. Si tiene alguno de los siguientes síntomas, busque atención médica inmediata:
- dificultad para respirar
- una apariencia pálida
- dolor de estómago o de espalda repentino y severo
- mareos o aturdimiento
- hinchazón o distensión abdominal en el área del estómago
Si el golpe en el hígado no fue demasiado severo, es posible que aún sienta algo de sensibilidad o un dolor leve, generalmente debajo de las costillas.
¿Cómo se diagnosticará una lesión hepática?
Para diagnosticar una lesión hepática, los médicos suelen utilizar una combinación de imágenes y análisis de sangre, así como un examen físico.
Si acude a la sala de emergencias o al consultorio de su médico de cabecera después de sufrir un golpe en el hígado, es posible que utilicen algunas o todas las siguientes pruebas:
- Ultrasonido. Esta es una prueba de imágenes rápida e indolora que usa ondas de ultrasonido para determinar si hay sangrado activo o significativo en el hígado.
- Tomografía computarizada. Una tomografía computarizada es un examen de imágenes indoloro que puede crear imágenes del interior de su hígado. Esto ayuda a su médico a ver qué tan grave es una lesión hepática y si hay daño en las partes más profundas de su hígado.
- Angiograma. Un angiograma, también conocido como arteriograma, produce imágenes de sus arterias. Su médico usará material de contraste o tinte, administrado por vía intravenosa, para observar el flujo de sangre. Puede indicarle a su médico si la sangre se escapa a través de las lágrimas en las paredes de los vasos sanguíneos de su hígado. Idealmente, su médico puede usar estas imágenes para identificar y detener el sangrado.
- Análisis de sangre. Su médico puede extraer sangre de una vena y analizarla para asegurarse de que la química de su hígado sea saludable. Este tipo de prueba puede mostrar si tiene los niveles adecuados de enzimas hepáticas, proteínas y bilirrubina en la sangre. También puede indicar si ha perdido una cantidad significativa de sangre o si tiene suficientes compuestos que necesita para ayudar a que la sangre se coagule.
Los médicos pueden realizar rápidamente la mayoría de estas pruebas para determinar si hay algún daño en el hígado y qué tan grave es. Si tiene otras lesiones, su médico también puede usar estas y otras pruebas para diagnosticar esas lesiones.
Tratamiento para lesiones hepáticas.
Es posible que las lesiones graves por un golpe o puñetazo en el hígado deban tratarse con cirugía o angioembolización.
La angioembolización implica sellar los vasos sangrantes en el hígado para detener la pérdida de sangre. Según una revisión de la investigación de 2011, la angioembolización es el "estándar de oro" para tratar las lesiones hepáticas y controlar las hemorragias.
Para golpes leves en el hígado, el tiempo y la vigilancia estrecha son los tratamientos que suelen recomendar los médicos.
Gracias a los avances en las imágenes y el tratamiento, su médico o equipo de atención médica puede observarlo atentamente para asegurarse de que no parezca estar perdiendo sangre y mantenga su presión arterial.
Mientras lo controlan, es probable que deba proporcionar muestras de sangre con frecuencia. Si ha perdido mucha sangre, su médico puede recomendarle una transfusión de sangre. O pueden sugerir la transfusión de ciertos compuestos sanguíneos que ayudan a que la sangre se coagule.
Cuidados personales para un golpe en el hígado.
Un golpe en el hígado puede hacer que se sienta sensible y adolorido. Si su médico recomienda manejar su lesión en casa, aquí hay algunos pasos que puede seguir para ayudar en su recuperación:
- Descanso. Descansar lo suficiente permite que su cuerpo y su hígado se recuperen. También reduce el riesgo de volver a dañar su hígado.
- Evite el alcohol. Su hígado descompone el alcohol que bebe. Si se lesionó el hígado, no beber alcohol ejerce menos presión sobre el hígado.
- Limite los medicamentos de venta libre. Su hígado es responsable de descomponer muchos medicamentos, incluido el acetaminofén (Tylenol). Pregúntele a su médico qué medicamentos debe evitar o limitar mientras su hígado sana.
Busque atención médica de emergencia si experimenta alguno de los siguientes síntomas mientras se recupera:
- dificultad para respirar
- dolor abdominal severo
- frecuencia cardíaca rápida
- mareo
La línea de fondo
El tamaño, la posición y la cantidad de vasos sanguíneos en su hígado lo hacen vulnerable a lesiones y sangrado debido a un traumatismo por fuerza contundente.
Dependiendo de la gravedad de la fuerza, el trauma en el hígado puede causar lesiones que van desde leves hasta potencialmente mortales.
En algunos casos, es posible que no sienta dolor o sepa que está sangrando internamente. Por eso es importante buscar tratamiento médico si ha tenido un golpe en el hígado.
Obtener la atención médica adecuada lo antes posible puede ayudar a minimizar las posibles complicaciones.