¿Qué es la vacuna contra la fiebre amarilla?
La fiebre amarilla es una enfermedad potencialmente mortal causada por el virus de la fiebre amarilla.
El virus se encuentra en partes de América del Sur y África. Se transmite a través de la picadura de mosquitos infectados con el virus. No se transmite de persona a persona.
Algunas personas con fiebre amarilla solo experimentan síntomas similares a los de la gripe y se recuperan por completo después de poco tiempo. Otros desarrollan una forma más grave de la infección que causa síntomas graves, como:
- fiebre alta
- vomitando
- piel amarilla (ictericia)
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), del 30 al 60 por ciento de las personas que desarrollan un caso grave de fiebre amarilla mueren.
No existe cura para la fiebre amarilla, aunque algunos tratamientos pueden ayudar a reducir los síntomas. También existe una vacuna contra la fiebre amarilla que protege a las personas contra el virus de la fiebre amarilla.
Explicamos cómo funciona la vacuna, cómo se administra y sus posibles efectos secundarios.
¿Cómo actúa la vacuna?
La vacuna contra la fiebre amarilla hace que su sistema inmunológico produzca anticuerpos contra el virus. Se administra como una inyección relativamente indolora.
Si se encuentra en los Estados Unidos y planea viajar a un área donde la fiebre amarilla es común, deberá vacunarse en un centro autorizado de vacunación contra la fiebre amarilla.
Puede encontrar sus ubicaciones aquí.
Originalmente, una sola dosis debía durar al menos 10 años. Pero en 2013, la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció que una sola inyección debería proporcionar inmunidad de por vida.
Tenga en cuenta que este cambio aún no se refleja en el Reglamento Sanitario Internacional, un documento legalmente vinculante publicado por la OMS. Como resultado, es posible que algunos países no acepten un certificado que tenga más de 10 años.
Puede consultar las regulaciones en países específicos aquí. Es posible que desee llamar a la embajada local antes de su viaje solo para estar seguro.
¿Cuáles son los efectos secundarios leves?
Como ocurre con casi cualquier otro medicamento o vacuna, algunas personas tienen una reacción a la vacuna contra la fiebre amarilla.
Por lo general, esta reacción es leve, con efectos secundarios como:
- fiebre
- dolores musculares
- dolor articular leve
Además, cualquier tipo de inyección puede causar dolor, enrojecimiento o hinchazón alrededor del lugar de la inyección.
Estos efectos secundarios generalmente comienzan poco después de la inyección y pueden durar hasta 14 días, aunque la mayoría se resuelve en una semana. Aproximadamente 1 de cada 4 personas que reciben la vacuna experimentan efectos secundarios leves.
¿Hay efectos secundarios graves?
Existe un pequeño riesgo de efectos secundarios graves por la vacuna contra la fiebre amarilla. El CDC afirma que esto incluye:
- una reacción alérgica grave, que afecta aproximadamente a 1 de cada 55.000 personas
- una reacción grave del sistema nervioso, que afecta aproximadamente a 1 de cada 125.000 personas
- enfermedad grave con insuficiencia orgánica, que afecta aproximadamente a 1 de cada 250.000
Después de recibir la vacuna, esté atento a estos síntomas de una reacción alérgica grave:
- cambios de comportamiento
- urticaria
- dificultad para respirar
- fiebre alta
- hinchazón de la cara, lengua o garganta
- mareo
- debilidad
Busque tratamiento de emergencia si experimenta alguno de estos pocos minutos u horas después de recibir la vacuna.
Otros síntomas que justifican una visita inmediata a un médico incluyen:
- Confusión
- tos
- dificultad para tragar
- irritabilidad
- Comezón
- nerviosismo
- latidos rápidos
- sarpullido
- dolor de cabeza intenso
- rigidez en el cuello
- palpitaciones en los oídos
- hormigueo
- vomitando
¿Quién necesita la vacuna?
La vacuna contra la fiebre amarilla se recomienda para lo siguiente:
- todas las personas de 9 meses o más que viven o viajan a áreas de América del Sur, África u otros países donde se encuentra el virus de la fiebre amarilla
- personas que viajan a países que requieren prueba de vacunación contra la fiebre amarilla
- cualquier persona que pueda entrar en contacto con el virus de la fiebre amarilla, como trabajadores de laboratorio o profesionales de la salud
Se aconseja a las personas embarazadas que se vacunen solo si deben viajar a un área donde haya una epidemia y no sea posible protegerse de las picaduras de mosquitos.
¿Alguien no debería conseguirlo?
La vacuna no debe administrarse a:
- niños menores de 9 meses de edad
- adultos mayores de 59 años
- personas con inmunidad reducida, como personas con VIH o quienes reciben quimioterapia
- personas que han tenido una reacción grave al huevo, la gelatina u otros ingredientes de la vacuna
- personas que han tenido una reacción alérgica grave a una dosis anterior de la vacuna
- personas a las que se les ha extirpado el timo o personas con un trastorno del timo
- viajeros mayores de 60 años que no hayan sido previamente vacunados contra la fiebre amarilla
Si tiene fiebre, es mejor esperar para recibir la vacuna hasta que se sienta mejor.
Además, las mujeres embarazadas o en período de lactancia solo deben vacunarse si existe un riesgo inevitable o si no es posible protegerse contra las picaduras de mosquitos.
La línea de fondo
La fiebre amarilla es una enfermedad grave, por lo que es importante vacunarse si planea estar en un área donde el virus es común.
Si no está seguro de si debe vacunarse, hable con un médico. Pueden ayudarlo a sopesar los beneficios y los riesgos.
Tenga en cuenta que la vacuna no es infalible. Cuando viaje a áreas con el virus de la fiebre amarilla, es importante protegerse contra las picaduras de mosquitos utilizando redes, repelentes de insectos y ropa protectora.
Trate de permanecer adentro durante las horas pico cuando los mosquitos pueden picar para reducir aún más su riesgo. La mayoría de las especies pican desde el anochecer hasta el amanecer, pero una especie se alimenta durante el día. Alojarse en habitaciones con aire acondicionado puede reducir su riesgo.