El estómago del corredor se conoce con varios otros nombres: barriga del corredor, trote del corredor, tripa del corredor y barriga del corredor. No importa cómo lo llames, no es divertido.
Los síntomas de calambres abdominales, la fuerte necesidad de ir al baño, las náuseas y la diarrea durante una carrera pueden ralentizar el ritmo y dificultar el entrenamiento.
Analizamos las causas fundamentales del estómago del corredor, junto con recomendaciones de tratamiento y prevención.
¿Qué causa los problemas de estómago durante o después de correr?
La literatura médica sobre la barriga del corredor sugiere que es causada por la mecánica del correr en sí, así como por factores dietéticos y hormonales.
Cuando estás corriendo durante un período de tiempo prolongado, el flujo sanguíneo que normalmente se dirige a tu sistema digestivo se desvía a tu sistema cardiovascular.
Esto puede interrumpir e irritar su proceso digestivo. Como resultado, es posible que sienta una fuerte necesidad de expulsar lo que haya en su sistema digestivo. Incluso puede terminar con síntomas de diarrea.
Mientras esto sucede, su cuerpo también se mueve hacia arriba y hacia abajo a medida que continúa corriendo. Este movimiento contribuye a sentir la necesidad de ir al baño, ya que el material de desecho se empuja alrededor de los intestinos y el ácido del estómago se derrama.
Finalmente, correr provoca la liberación de hormonas como el cortisol. Estas hormonas pueden sentirse bien cuando golpean, causando la familiar euforia que los corredores conocen como "euforia del corredor".
Pero estas hormonas también pueden afectar su sistema digestivo y aumentar la confusión que siente su cuerpo durante una actividad de resistencia como correr.
¿Qué tan común es la barriga de corredor?
La barriga de corredor es común, especialmente entre los corredores de fondo. Los investigadores estiman que entre el 30 y el 90 por ciento de los corredores y atletas de deportes de resistencia experimentan síntomas gastrointestinales durante su entrenamiento y eventos de carreras.
En un estudio de 145 corredores de resistencia, los hombres experimentaron molestias gastrointestinales en el 84 por ciento de las carreras de entrenamiento en el transcurso de 30 días. Las mujeres informaron síntomas el 78 por ciento de las veces.
¿Cómo se pueden tratar o prevenir los problemas estomacales durante o después de correr?
No existe cura para la barriga del corredor, pero hay varios pasos preventivos que puede tomar para tratar de minimizar los síntomas.
Dieta
Un cambio en tu dieta puede mejorar tu rendimiento mientras corres. También puede provocar menos molestias durante los entrenamientos y las carreras.
Se ha demostrado que una dieta baja en ciertos azúcares y carbohidratos, a veces llamada dieta baja en FODMOP, tiene un efecto positivo en los problemas del tracto gastrointestinal durante el ejercicio. Una dieta baja en FODMOP evita el trigo y los lácteos, así como los edulcorantes artificiales, la miel y muchas frutas y verduras.
También puede ser consciente de cuando consume sus alimentos y bebidas. Una revisión de la literatura muestra que comer y beber justo antes de hacer ejercicio puede causar un fuerte dolor abdominal durante el ejercicio.
Probióticos
Un intestino sano y evacuaciones intestinales regulares pueden significar que experimente menos molestias digestivas durante los ejercicios de resistencia.
Tomar suplementos probióticos puede ayudar a fortalecer su intestino y hacerlo menos propenso a ir al baño durante su entrenamiento.
Un estudio de 2014 mostró que 4 semanas de suplementos probióticos ayudaron a mejorar la resistencia y la digestión del corredor cuando corren a altas temperaturas.
Un estudio similar de 2019 demostró que los probióticos ayudaron a disminuir los síntomas gastrointestinales de los corredores durante un maratón.
Hidratación
Los calambres, las náuseas y los puntos en el abdomen durante la carrera pueden ser el resultado de una hidratación inadecuada.
La hidratación antes y durante una carrera larga es importante, pero averiguarlo puede ser complicado.
Beber demasiada agua podría empeorar los calambres y la irritación digestiva. La apuesta más segura es desarrollar el hábito de beber suficiente agua con regularidad y usar bebidas con infusión de electrolitos justo antes y después de correr.
Práctica
Incluso los atletas de élite que corren múltiples maratones cada año experimentan la barriga de corredor de vez en cuando.
Encontrar una rutina que funcione para su sistema y seguirla en sus días de entrenamiento y carrera puede hacer que la barriga del corredor sea un obstáculo menor para usted. Puede que sea necesario experimentar un poco para hacerlo bien, pero una vez que encuentre lo que funciona, apéguese a ello.
Como anécdota, muchos corredores confían en tener una rutina sólida antes de la carrera que implica el mismo refrigerio previo a la carrera y los mismos alimentos de recuperación después de cada evento.
Cuando ver a un doctor
Si experimenta con frecuencia el estómago de corredor, es posible que tenga una condición que no está directamente relacionada con correr.
El síndrome del intestino irritable (SII) y la enfermedad celíaca tienen síntomas similares a los de la barriga del corredor, pero pueden ser provocados por otros factores y actividades.
Debe hablar con su médico si experimenta alguno de los siguientes síntomas:
- episodios de diarrea y calambres que ocurren más de una vez a la semana
- estreñimiento frecuente
- náuseas, gases e hinchazón independientemente de si ha estado corriendo o no
- evacuaciones intestinales que a menudo son líquidas o sangre en las heces
Su médico le hablará sobre sus síntomas para determinar si lo que está experimentando es un efecto secundario de correr o un diagnóstico diferente. También pueden ordenar una colonoscopia para descartar cualquier otra condición posible.
Conclusiones clave
La barriga de corredor no es infrecuente y no existe una cura fácil para evitar que suceda.
Planificar sus comidas, evitar los alimentos desencadenantes, tomar probióticos y mantenerse hidratado puede ayudarlo a mejorar su rendimiento en la pista y, al mismo tiempo, disminuir las posibilidades de que tenga estos síntomas.
Si los síntomas gastrointestinales son un obstáculo constante en sus carreras, debe hablar con su médico para descartar otras posibles afecciones de salud.