¿Qué es una gammagrafía renal?
Una gammagrafía renal implica el uso de material radiactivo nuclear para examinar los riñones y evaluar su función. Una gammagrafía renal también se conoce como gammagrafía renal, imagenología renal nuclear o renograma.
Otras formas de imágenes renales incluyen tomografías computarizadas, rayos X, ultrasonidos y resonancias magnéticas. Siga leyendo para saber cómo y por qué se realizan las exploraciones renales nucleares y qué pueden revelar.
Durante este procedimiento, un técnico inyecta un material radiactivo llamado radioisótopo en su vena. El radioisótopo libera rayos gamma. Una cámara o escáner gamma puede detectar rayos gamma desde el exterior de su cuerpo.
La cámara gamma escanea el área del riñón. Realiza un seguimiento del radioisótopo y mide cómo lo procesan los riñones. La cámara también funciona con una computadora para crear imágenes.
Estas imágenes detallan la estructura y el funcionamiento de los riñones en función de cómo interactúan con el radioisótopo.
Las imágenes de una gammagrafía renal pueden mostrar anomalías tanto estructurales como funcionales. Esto ayuda a los médicos a diagnosticar un problema renal en sus primeras etapas sin técnicas invasivas o cirugía.
¿Por qué necesito una gammagrafía renal?
Una gammagrafía renal identifica problemas con la función renal. Normalmente, los dos riñones:
- eliminar la urea, o los desechos líquidos, de la sangre produciendo orina
- mantener un equilibrio de sustancias químicas, como sodio y potasio, en la sangre
- Suministrar la hormona eritropoyetina, que favorece el crecimiento de los glóbulos rojos.
- controlar la presión arterial mediante la producción de la hormona renina
- proporcionar la hormona calcitriol, que suministra calcio a los huesos
Un cambio en la función renal generalmente comienza de manera gradual y sin síntomas. En muchos casos, los análisis de sangre y orina de rutina, como los que se realizan en un examen físico anual, muestran los primeros signos de una función renal reducida.
Una gammagrafía renal puede identificar la causa de la función renal reducida. La causa puede ser una enfermedad, obstrucción o lesión de los riñones.
Una gammagrafía renal puede explorar más de un tipo de problema durante el mismo procedimiento. Una gammagrafía renal mide la función renal al monitorear el flujo del radioisótopo y la eficiencia con la que los riñones lo absorben y lo expulsan.
También muestra anomalías en la estructura, tamaño o forma de sus riñones.
Las exploraciones renales pueden identificar y evaluar:
- disminución del flujo sanguíneo a los riñones
- hipertensión renovascular, que es presión arterial alta en las arterias renales
- tumores o quistes
- abscesos
- enfermedad del riñon
- el éxito de los tratamientos renales
- el rechazo de un trasplante de riñón
¿Cómo me preparo para una gammagrafía renal?
Por lo general, no es necesario realizar ningún tipo de preparación especial antes de una gammagrafía renal. Por lo general, puede comer su dieta normal. La sedación no suele ser necesaria.
Debe informar a su médico sobre cualquier medicamento recetado o de venta libre que esté tomando. Discuta cómo usarlos antes y durante la prueba.
Su médico puede brindarle instrucciones especiales si está tomando medicamentos que podrían afectar los resultados de la gammagrafía renal. Estos medicamentos incluyen:
- diuréticos o píldoras de agua
- Inhibidores de la ECA para afecciones cardíacas o presión arterial alta
- betabloqueantes para afecciones cardíacas o presión arterial alta
- medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE), como aspirina o ibuprofeno
¿Qué sucede durante una gammagrafía renal?
Una gammagrafía renal es un procedimiento ambulatorio o que se realiza el mismo día. No tendrá que quedarse en el hospital durante la noche. Un técnico en medicina nuclear realiza la exploración. Por lo general, esto se realiza en el departamento de radiología de un hospital o en un consultorio médico con equipo especial.
Según los motivos de su exploración, la prueba puede tardar entre 45 minutos y 3 horas. Habla con el técnico de antemano si tienes claustrofobia porque la cámara puede pasar cerca de tu cuerpo.
Antes de su procedimiento, eliminará cualquiera de los siguientes elementos que podrían interferir con su escaneo:
- ropa
- joyas
- dentadura postiza
- artículos de metal
Es posible que tenga que ponerse una bata de hospital. Luego se acostará en una mesa de escaneo.
Un técnico puede insertar una línea intravenosa (IV) en una vena de su mano o brazo. Luego, el técnico insertará un radioisótopo en una vena de su brazo. Es posible que sienta un golpe rápido y agudo con la inyección.
Puede haber un período de espera entre la inyección y la primera exploración para permitir que sus riñones procesen el radioisótopo.
El escáner detectará los rayos gamma del radioisótopo y creará imágenes del área. Debido a que cualquier movimiento puede alterar o difuminar la imagen, deberá permanecer quieto mientras el escáner crea una imagen.
Si necesita la exploración porque tiene presión arterial alta, es posible que reciba un medicamento para la presión arterial alta llamado inhibidor de la enzima convertidora de angiotensina (ECA) durante la prueba. Esto permite comparar sus riñones antes y después de que se absorba el medicamento.
Si le harán la gammagrafía para buscar obstrucciones renales, es posible que le administren un diurético o una pastilla de agua para promover el paso de la orina a través de los riñones. Esto le permite a su médico observar las restricciones al flujo de orina.
Si necesita tener la vejiga vacía para la exploración, es posible que necesite un tubo blando llamado catéter para mantener esta condición.
El técnico retirará la vía intravenosa y el catéter después de la exploración. Luego puede volver a ponerse la ropa y salir del hospital.
Por lo general, puede volver a su dieta y rutina diaria después del procedimiento, a menos que su médico le indique lo contrario. El radioisótopo saldrá de su cuerpo de forma natural. Beber líquidos y orinar con frecuencia puede acelerar este proceso.
¿Cuáles son las complicaciones asociadas con una gammagrafía renal?
Las imágenes de medicina nuclear se consideran seguras. El radioisótopo lo expone a menos radiación que una radiografía. La pequeña cantidad de exposición a la radiación se encuentra principalmente en el área de los riñones. Pasa de su cuerpo de forma natural en 24 horas.
Las bajas dosis de radiación que se utilizan en los procedimientos de medicina nuclear no tienen ninguna conexión con ningún efecto negativo a largo plazo.
Aunque la exposición a la radiación es mínima y de corta duración, informe a su médico si está embarazada o cree que podría estarlo. Además, informe a su médico si está amamantando para asegurarse de que no haya contaminación de su leche materna.
A diferencia de los tintes intravenosos, los radioisótopos conllevan pocos riesgos de reacciones alérgicas. Las reacciones alérgicas a los radioisótopos son posibles pero raras. Una gammagrafía renal es una buena opción si ha tenido una reacción al medio de contraste que se usa en las radiografías del sistema urinario.
El pinchazo de la aguja para la vía intravenosa puede causar:
- incomodidad
- enrojecimiento
- sangrado
- hinchazón
Comuníquese con su médico si persiste alguno de estos síntomas. Podrían indicar una infección.
Dependiendo de su estado físico o de si ha tenido una cirugía o lesión reciente, es posible que sienta molestias o dolor por estar acostado en la mesa del escáner en una posición inmóvil durante mucho tiempo.
También puede sentirse mareado al levantarse de la mesa. Este mareo e incomodidad solo deberían durar un momento.
¿Qué significan los resultados?
Después de que el técnico complete su gammagrafía renal, un radiólogo de medicina nuclear interpretará los hallazgos de la imagen. Enviarán un informe completo a su médico. Su médico discutirá los resultados con usted.
Los resultados anormales de una gammagrafía renal pueden indicar:
- enfermedad del riñon
- la presencia de quistes o tumores
- un bloqueo de las arterias renales debido a una lesión o trauma
- un bloqueo que restringe el flujo de orina de los riñones a la vejiga
- inflamación del riñón debido a una infección
- hipertensión renovascular
- problemas con un trasplante de riñón
- insuficiencia renal
Su médico puede requerir más pruebas para aclarar un diagnóstico. El tamaño y la forma de su riñón influyen en los resultados de su exploración. Una estructura renal anormal podría resultar en una lectura incorrecta. Puede ser necesaria una confirmación adicional.
Además, debido a que las exploraciones renales no pueden identificar la diferencia entre un quiste y un tumor, pueden ser necesarios procedimientos de diagnóstico adicionales para un diagnóstico más definitivo.