La enfermedad de Parkinson es probablemente más conocida por sus efectos sobre el movimiento. Los síntomas más evidentes son extremidades rígidas, movimientos lentos y temblores. Menos conocidas son las complicaciones que ocurren debido a varios síntomas, como depresión, trastornos del sueño y demencia.
Ya sea que le hayan diagnosticado Parkinson o que tenga un ser querido con la enfermedad, aquí hay 11 complicaciones que debe tener en cuenta para que pueda estar atento a las señales de advertencia.
1. Ansiedad y depresión
Es normal sentirse ansioso o molesto cuando vive con una afección crónica como la enfermedad de Parkinson. Sin embargo, la depresión es más que un subproducto de vivir con esta enfermedad. Puede ser un resultado directo de la enfermedad debido a cambios químicos en el cerebro. El Parkinson puede contribuir a la depresión a través de sus efectos sobre la hormona serotonina, que regula el estado de ánimo.
Hasta la mitad de las personas con la enfermedad de Parkinson tienen depresión clínica en algún momento de sus vidas. Si se siente deprimido o ha perdido el interés en la vida, hable con su médico. Los antidepresivos y la terapia pueden ayudar a aliviar su depresión.
2. Dificultad para tragar
El Parkinson debilita los músculos de la boca y la mandíbula que le ayudan a masticar y tragar los alimentos. Como resultado, la comida se puede atascar en la garganta. En las últimas etapas de la enfermedad de Parkinson, la dificultad para tragar puede provocarle ahogo o permitir que los alimentos y líquidos se filtren a los pulmones y provoquen neumonía.
Algunas personas con Parkinson producen demasiada o muy poca saliva. El exceso de saliva puede provocar babeo. Muy poca saliva puede hacer que tragar sea incómodo.
Si tiene problemas para tragar, consulte a su médico. Un patólogo del habla y el lenguaje puede enseñarle técnicas para ayudar a que los alimentos y los líquidos bajen más fácilmente.
3. Demencia
Aunque el Parkinson es principalmente un trastorno del movimiento, también puede alterar partes del cerebro que controlan el pensamiento y la memoria. Entre el 50 y el 80 por ciento de las personas con Parkinson desarrollan depósitos de proteínas anormales llamados cuerpos de Lewy en sus cerebros. Estos son los mismos depósitos que se encuentran en personas que tienen demencia con cuerpos de Lewy (DLB).
La demencia en la enfermedad de Parkinson causa síntomas como:
- pérdida de memoria
- dificultad para concentrarse
- falta de criterio
- alucinaciones (ver cosas que no son
verdadero) - delirios (ideas falsas)
- irritabilidad
- trastornos del sueño
- ansiedad
Estos síntomas pueden comenzar varios años después de la aparición de la enfermedad de Parkinson. Algunos de los mismos medicamentos que tratan la enfermedad de Alzheimer y otras formas de demencia también ayudan con la demencia de Parkinson.
4. Trastornos del sueño
Los trastornos del sueño son comunes en personas con enfermedad de Parkinson. Cualquiera de estos problemas nocturnos puede interrumpir su sueño:
- dificultad para conciliar el sueño (insomnio)
- pesadillas
- representar sueños (comportamiento de sueño REM
trastorno) - síndrome de piernas inquietas (SPI)
- apnea del sueño
- necesidad frecuente de orinar por la noche
(nicturia) - confusión en la noche
Un especialista en sueño puede diagnosticar estos problemas y recomendar tratamientos para ayudarlo a dormir más profundamente.
5. Problemas de vejiga e intestinos
La dificultad para controlar la micción y las deposiciones se debe a un problema con los mensajes que llegan de su cerebro a su vejiga e intestinos. Los problemas de vejiga e intestinos relacionados con la enfermedad de Parkinson incluyen:
- una necesidad constante de orinar (urgencia
incontinencia o vejiga hiperactiva) - goteando cuando se ríe, hace ejercicio o estornuda
(incontinencia de esfuerzo) - necesidad frecuente de orinar por la noche
- chorro de orina débil
- estreñimiento
- Diarrea
- pérdida de heces (incontinencia fecal)
Hacer algunos cambios en el estilo de vida puede ayudar a mejorar los problemas intestinales y de la vejiga. Por ejemplo:
- Ir al baño en horarios regulares
durante todo el día. - Aumente su ingesta de fibra y líquidos.
- Toma un ablandador de heces.
Consulte a su médico para una evaluación. Los medicamentos y otros tratamientos pueden ayudar a aliviar la incontinencia debida a la enfermedad de Parkinson.
6. Movimientos involuntarios (discinesia)
Esta complicación no es causada por la enfermedad de Parkinson, sino por el medicamento que se usa para tratarla. Las personas que toman altas dosis del medicamento levodopa (o que permanecen tomándolas durante muchos años) pueden desarrollar movimientos incontrolados como sacudir la cabeza, contraerse, balancearse o inquietarse. Estos movimientos se denominan discinesia.
Los cambios en los niveles de dopamina en su cerebro causan discinesia. Cuando toma levodopa, los niveles de dopamina aumentan. A medida que el efecto de la droga desaparece, los niveles bajan. Cambiar su dosis de levodopa o agregar un medicamento de fórmula de liberación prolongada puede ayudar a prevenir esta complicación. Hable con su médico si toma levodopa y experimenta discinesia.
7. Fatiga
La dificultad para dormir por la noche, que es común en personas con la enfermedad de Parkinson, puede hacer que se sienta cansado durante el día. Pero la fatiga de Parkinson no es un agotamiento normal. Algunas personas se sienten tan cansadas que apenas pueden levantarse de la cama. Tomar siestas, hacer ejercicio y tomar sus medicamentos según lo prescrito pueden ayudar a combatir esta complicación de Parkinson.
8. Dolor
Aproximadamente el 10 por ciento de las personas con Parkinson experimentan dolor como primer síntoma. Hasta el 50 por ciento de las personas diagnosticadas con la enfermedad experimentarán dolor en algún momento.
Varios factores de la enfermedad de Parkinson desencadenan el dolor. Las causas incluyen contracciones musculares y procesamiento anormal de las señales de dolor en el cerebro.
El dolor puede centrarse en su:
- espalda
- cuello
- espalda
- pies
Puede sentir:
- dolor
- incendio
- afilado
- como alfileres y agujas
- pulsante
La levodopa, el mismo medicamento que se usa para controlar los síntomas de Parkinson, también puede ayudar con el dolor. Alivia los espasmos musculares que provocan el dolor.
Otros tratamientos para el dolor incluyen:
- analgésicos analgésicos
- terapia física
- acupuntura
- ejercicio, incluido tai chi y yoga
9. Cambios en la presión arterial
Puede notar que se marea un poco cada vez que se pone de pie desde una posición sentada o acostada. Este síntoma se llama hipotensión ortostática o postural. Es causado por una caída en la presión arterial cuando cambia de posición. Afecta aproximadamente a 1 de cada 5 personas con Parkinson.
Su cuerpo tiene un mecanismo interno que ajusta su presión arterial cada vez que se mueve. La hipotensión postural ocurre cuando hay un problema con este mecanismo. Algunos medicamentos para el Parkinson también pueden provocar una caída de la presión arterial.
Para evitar caídas repentinas de la presión arterial:
- Muévase lentamente cuando esté sentado o
posición acostada a pararse. - Beba ocho vasos de agua al día (extra
el líquido aumenta la presión arterial). - Pregúntele a su médico si necesita ajustar el
dosis de cualquier medicamento que pueda estar afectando su presión arterial.
10. Deterioro del sentido del olfato
Un sentido del olfato reducido es un síntoma temprano común, pero a menudo pasado por alto, de la enfermedad de Parkinson. Los investigadores creen que se debe al daño nervioso por la acumulación anormal de la proteína alfa-sinucleína (o alfa-sinucleína) en partes del cerebro que controlan el sentido del olfato.
11. Disminución del deseo sexual
El Parkinson daña los nervios que permiten a los hombres tener una erección y proporcionan sensibilidad a los genitales. También provoca movimientos rígidos o espasmódicos, que pueden hacer que el acto de tener relaciones sexuales sea incómodo.
Como resultado, hasta el 80 por ciento de las personas con la enfermedad de Parkinson pierden el deseo, o la capacidad, de tener relaciones sexuales. Su médico puede ayudarlo a encontrar formas de solucionar los problemas sexuales debidos a la enfermedad de Parkinson.