Visión general
La vejiga promedio de un adulto puede contener entre 1 1/2 y 2 tazas de orina antes de recibir ese "¡tengo que irme ahora mismo!" urge, según el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales. Si bien su vejiga puede estirarse para contener un poco más que esto, se meterá en un territorio incómodo si lo hace.
Sin embargo, hay muchas personas que sienten que no pueden retener ni 50 mililitros de orina sin tener que ir al baño. Si ese es tu caso, entonces hay formas en las que puedes "entrenar" tu vejiga para que no corras hacia el baño cada vez que tomas un sorbo de agua.
Antes de hacerlo, siempre es una buena idea hablar con un médico para asegurarse de que no tiene una afección médica subyacente, como una infección del tracto urinario, que pueda estar afectando su vejiga.
Cómo contener el pipí
Hay una línea muy fina entre contener la orina y mantenerla demasiado tiempo. La mayoría de los médicos recomendarán ir al baño cada tres o cuatro horas, excepto cuando esté dormido, para vaciar la vejiga. Si descubre que tiene que ir con mucha más frecuencia, aprender a sostener la orina puede ayudar.
Aguantar la orina durante demasiado tiempo puede ser perjudicial para usted. Puede permitir que el exceso de bacterias se acumule en la vejiga y puede contribuir a las infecciones del tracto urinario. Como resultado, es importante encontrar el equilibrio adecuado entre ir con demasiada frecuencia y no hacerlo con la suficiente frecuencia.
Técnicas de sujeción
Cuando sienta el impulso, busque formas de distraerse o al menos disminuir el impulso de ir. Algunas formas en que puede lograr esto incluyen:
- Técnicas de distracción. Esto puede incluir escuchar música, repetir un mantra, leer algo o incluso hacer una llamada telefónica a alguien que entienda que solo necesita hablar unos minutos.
- Cambia tu posición. Inclinarse ligeramente hacia adelante a veces puede aliviar la presión del estómago y la vejiga, lo que puede reducir la sensación de que necesita ir. Si este cambio de posición no ayuda, intente encontrar otro que sí lo haga.
- Retire cualquier líquido de la vista. Solo pueden recordarte que debes irte.
Cómo controlar tu vejiga
El entrenamiento de la vejiga es un método preventivo que le ayuda a reentrenar la vejiga para que retenga más orina. Este es un enfoque de mente y cuerpo que ayuda a su cerebro y vejiga a aprender a tolerar la presencia de más orina antes de crear la necesidad de irse de inmediato.
Los pasos para el entrenamiento de la vejiga incluyen:
- Lleve un diario de tres a siete días sobre cuándo va al baño. Anote la hora, la cantidad de orina que sale y la cantidad de líquido que bebe durante el día. Puede medir con un recolector de orina que se coloca sobre la taza del inodoro.
- Revise su diario e identifique cómo su ingesta de líquidos se compara con su producción de orina. Cuente cuántas veces al día va y cuánto tiempo pasa entre visitas al baño. Si orina menos de 1 1/2 a 2 tazas cada vez que va o va más de cada 2 horas, hay margen de mejora.
- Trate de poner su vejiga en un horario. Comprométase a ir una vez por la mañana cuando se despierte y a darse el tiempo suficiente para vaciar completamente la vejiga. Después de esto, intente ir cada dos o tres horas.
- Tómese un tiempo cuando vaya y trate de ponerse en una posición cómoda. Por ejemplo, pasar el cursor sobre el asiento del inodoro para evitar tocarlo puede crear una presión adicional en la vejiga que evita que se vacíe por completo. Como resultado, es posible que sienta que tiene que volver a ir pronto porque no sacó toda la orina la primera vez.
- Evite salir por conveniencia, como cuando ve un baño. Estos viajes rápidos y aparentemente inofensivos pueden indicarle de manera ineficaz a su vejiga que necesita orinar con más frecuencia.
- Practique ejercicios del suelo pélvico como los ejercicios de Kegel durante todo el día. Esto implica concentrarse en los músculos que usa para detener el flujo de orina y contraerlos durante 5 a 10 segundos. Realiza cinco repeticiones. Los ejercicios de Kegel pueden fortalecer su piso pélvico para ayudarlo a retener la orina por más tiempo.
- Cuando sienta la necesidad de ir entre los intervalos del baño, intente sentarse durante unos minutos. Respire profundamente y concéntrese en otra cosa que no sea su vejiga. Haga que su objetivo sea alcanzar al menos cinco minutos de espera. Con el tiempo, puede extenderlo a 10 o incluso 20 minutos.
- Continúe llevando su diario del baño para que pueda registrar su progreso e identificar los momentos de su día que parecen ser zonas problemáticas.
Algunas personas pueden intentar engañar a su entrenamiento de la vejiga reduciendo la cantidad que beben al día. Aún necesita líquidos para mantenerse saludable y prevenir la deshidratación. Hay algunas formas en las que aún puede hidratarse sin activar la vejiga. Esto incluye dejar de beber una o dos horas antes de acostarse.
También puede programar su ingesta de agua con sus comidas cuando es probable que vaya al baño. Por ejemplo, puede beber uno o dos vasos de agua unos 30 minutos antes de comer. Para cuando haya terminado, es probable que deba ir al baño antes de regresar al trabajo, la escuela u otras actividades.
Si bien el entrenamiento de la vejiga puede ser útil, es importante abordarlo sabiendo que probablemente tendrá algunos contratiempos. Si sigue intentándolo y no ve una mejora, hable con un médico.
Quitar
Cuando va al baño con demasiada frecuencia, aprender a contener la orina puede ser útil. Siempre que un médico determine que no tiene una afección subyacente como una vejiga débil o una infección del tracto urinario, puede probar técnicas para entrenar su vejiga para que pase intervalos más largos sin orinar.