COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, SARS-CoV-2, tiene una variedad de síntomas potenciales. Uno de ellos es el dolor de cabeza.
Un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) examinó más de 55.000 casos confirmados de COVID-19. Encontró que el dolor de cabeza se produjo en el 13,6 por ciento de los casos de COVID-19. Sin embargo, la aparición real de dolor de cabeza en COVID-19 puede ser mayor en algunas poblaciones.
El dolor de cabeza debido a COVID-19 a menudo se describe como de intensidad moderada a severa. En algunos casos, puede sentirse similar a un ataque de migraña.
Continúe leyendo para obtener más información sobre la migraña y el COVID-19, cómo tratar la migraña durante la pandemia y cuándo buscar atención médica.
Migraña y el nuevo coronavirus
La migraña es un tipo específico de dolor de cabeza. Sus síntomas incluyen dolor punzante o pulsante intenso que puede ir acompañado de sensibilidad a las luces o sonidos, así como náuseas y vómitos.
El dolor de cabeza es un síntoma potencial de COVID-19 y, a menudo, puede sentirse similar a un ataque de migraña. Si bien todavía estamos aprendiendo más sobre COVID-19 y el dolor de cabeza, los investigadores han notado que un dolor de cabeza debido a COVID-19 a menudo es:
- de intensidad moderada a severa
- caracterizado por tener un dolor pulsante o opresivo
- fieltro en ambos lados de la cabeza (bilateral)
- peor con la actividad física o al mover la cabeza
- difícil de aliviar con analgésicos de venta libre (OTC) como acetaminofén (Tylenol) o ibuprofeno (Advil, Motrin)
- por lo general ocurre al principio de la infección, pero puede estar asociado con un empeoramiento de la enfermedad cuando aparece más tarde en la infección
Si bien el dolor de cabeza por COVID-19 puede sentir Al igual que un ataque de migraña, los dos tipos de dolor de cabeza son en realidad diferentes:
- Un ataque de migraña es un dolor de cabeza primario. Se cree que los cambios en la señalización nerviosa o los niveles de neurotransmisores como la serotonina lo provocan. La genética y el medio ambiente también pueden influir.
- El dolor de cabeza por COVID-19 es un dolor de cabeza secundario. Esto significa que es causado por otra enfermedad o afección subyacente (en este caso, COVID-19).
De hecho, las personas con antecedentes de migraña han informado diferencias notables entre los dolores de cabeza por COVID-19 y los ataques de migraña. Por ejemplo:
- Un dolor de cabeza por COVID-19 puede no ocurrir con otros síntomas típicos de la migraña como náuseas, vómitos o sensibilidad a las luces y los sonidos.
- Un dolor de cabeza que ocurre con COVID-19 puede sentirse diferente a los ataques de migraña típicos de una persona. Por ejemplo, puede sentirse en ambos lados de la cabeza (bilateral) en contraposición a un lado (unilateral).
- Es posible que el dolor de cabeza debido al COVID-19 no responda a los medicamentos que se usan para tratar el dolor agudo de la migraña.
- A diferencia de un ataque de migraña, no se ha informado que un dolor de cabeza por COVID-19 esté precedido por aura, un grupo de síntomas que pueden ocurrir antes o durante un ataque de migraña.
¿Por qué algunas personas tienen dolores de cabeza similares a las migrañas con COVID-19?
Los investigadores todavía están investigando el mecanismo por el cual el nuevo coronavirus, SARS-CoV-2, causa dolores de cabeza. Muchas de las teorías actuales incluyen la participación del nervio trigémino.
El nervio trigémino es un gran nervio craneal que es importante para el movimiento y la sensibilidad de partes de la cara y la cabeza. La activación de las vías del nervio trigémino también se asocia con migraña y otros tipos de dolor de cabeza.
Se cree que la infección por SARS-CoV-2 podría desencadenar un dolor de cabeza a través del nervio trigémino de varias formas posibles:
- infección viral directa de las terminaciones del nervio trigémino, que se puede encontrar en los conductos nasales (un sitio de infección temprana)
- invasión de los tejidos vasculares (vasos sanguíneos), lo que lleva a cambios que pueden estimular las terminaciones del nervio trigémino
- una liberación de varias moléculas inflamatorias que conducen a una tormenta inflamatoria secundaria a una infección
Si bien algunos dolores de cabeza debidos a COVID-19 pueden ser similares a los ataques de migraña, es importante tener en cuenta que se ha descrito un amplio espectro de dolores de cabeza en asociación con COVID-19. Estos pueden incluir dolores de cabeza que son:
- similar a un dolor de cabeza que experimentaría cuando tiene gripe o resfriado común
- similar a un dolor de cabeza tensional
- dolor de cabeza asociado con tos
¿Puede tratar su migraña si tiene COVID-19?
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), debe seguir tomando medicamentos para las afecciones de salud subyacentes durante la pandemia.
Esto incluye medicamentos para la migraña, que se consideran seguros para continuar tomando.
Al principio de la pandemia, existía la preocupación de que algunos medicamentos utilizados para la migraña pudieran aumentar el riesgo de COVID-19. Esto se debió a que se pensó que podrían aumentar los niveles de ACE2 en el cuerpo. ACE2 es la proteína a la que se une el SARS-CoV-2 para ingresar a una célula.
En general, la investigación no ha respaldado estas preocupaciones:
- AINE. Los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE) como el ibuprofeno se utilizan a menudo para tratar el dolor agudo de la migraña. Sin embargo, actualmente no hay evidencia específica de que los AINE como el ibuprofeno aumenten el riesgo de COVID-19.
- Medicamentos para la presión arterial. Los inhibidores de la ECA y los ARB se utilizan a veces para prevenir los ataques de migraña. Sin embargo, los estudios en personas con presión arterial alta encontraron que no aumentaron el riesgo de contraer COVID-19 o desarrollar una enfermedad grave.
Manejo de la migraña durante la pandemiaAdemás de seguir tomando sus medicamentos, también puede hacer lo siguiente durante la pandemia para ayudar a controlar su migraña:
- Verifique su suministro de medicamentos. El CDC recomienda mantener un suministro de al menos 30 días de medicamentos recetados y de venta libre.
- Mantén una rutina. Es probable que la pandemia haya interrumpido la rutina diaria de todos de alguna manera. Intente adaptar su rutina habitual a esta "nueva normalidad" para ayudar a prevenir los ataques de migraña.
- Continúe practicando un estilo de vida saludable. Esto incluye hacer ejercicio con regularidad, llevar una dieta saludable y evitar los desencadenantes de la migraña.
- Reducir el estrés.Tome medidas para reducir sus niveles de estrés. Puedes hacerlo mediante técnicas de relajación como el yoga y la meditación, o incluso realizando una actividad que disfrutes. Además, trate de evitar consultar las noticias con demasiada frecuencia.
- Alcanzar. Practicar el distanciamiento físico puede resultar aislado. No dude en conectarse con amigos y familiares durante este tiempo a través de una llamada telefónica o un chat de video.
- Habla con tu doctor. Si tiene preguntas o inquietudes sobre la migraña o los medicamentos, asegúrese de comunicarse con su médico. Muchos médicos ofrecen visitas de telesalud en lugar de visitas en persona durante la pandemia.
¿Las personas con migraña son más propensas a desarrollar COVID-19?
La investigación sobre COVID-19 y sus factores de riesgo asociados está en curso. Actualmente no hay evidencia que sugiera que las personas que tienen migraña tengan un mayor riesgo de contraer COVID-19.
El CDC ha desarrollado una lista de afecciones que, según las investigaciones actuales, pueden aumentar su riesgo de contraer una enfermedad grave por COVID-19. Actualmente, la migraña no está en esta lista.
Si tiene antecedentes de migraña, es posible que tenga una mayor probabilidad de ciertos tipos de síntomas de dolor de cabeza, en caso de que se enferme de COVID-19.
Un estudio analizó el dolor de cabeza por COVID-19 en 112 personas con antecedentes de diferentes tipos de dolor de cabeza. Encontró que las personas con antecedentes de migraña tenían una mayor probabilidad de experimentar un tipo de dolor pulsátil en comparación con las personas con antecedentes de otros tipos de dolores de cabeza.
¿Cuáles son los factores de riesgo comunes para desarrollar COVID-19?
Corre el riesgo de contraer COVID-19 si ha estado en contacto cercano con alguien con el virus. El CDC define el contacto cercano como estar dentro de los 6 pies de alguien con una infección por SARS-CoV-2 durante al menos 15 minutos.
Además, los CDC han identificado varios factores de riesgo de enfermedades más graves debido a COVID-19. Éstos incluyen:
- mayor edad
- cáncer
- enfermedad renal crónica
- Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)
- afecciones cardíacas, incluidas miocardiopatías, enfermedad de las arterias coronarias e insuficiencia cardíaca
- obesidad
- anemia falciforme
- diabetes tipo 2
- sistema inmunológico debilitado debido a recibir un trasplante de órgano
Los CDC continúan evaluando otras afecciones como factores de riesgo de enfermedades graves. Algunos ejemplos incluyen:
- asma
- Alta presión sanguínea
- enfermedad del higado
¿Cuáles son los síntomas comunes de COVID-19?
Hay algunos síntomas de COVID-19 que se informan con más frecuencia que el dolor de cabeza. Éstos incluyen:
- fiebre
- tos
- fatiga
- dificultad para respirar
Otros síntomas que pueden ocurrir con una frecuencia similar o menor al dolor de cabeza son:
- dolor de garganta
- achaques
- escalofríos
- nariz congestionada o que moquea
- síntomas digestivos como náuseas, vómitos o diarrea
- pérdida del olfato o del gusto
Si cree que tiene COVID-19, planee quedarse en casa y limitar su contacto con los demás. Comuníquese con su médico para informarle sobre sus síntomas y recibir consejos sobre cómo manejarlos.
Cuándo buscar atención médica si cree que puede tener COVID-19Si bien la mayoría de los casos de COVID-19 son leves, existen algunos síntomas que son advertencias de una enfermedad grave. Busque atención médica inmediata si experimenta alguno de los siguientes:
- respiración dificultosa
- dolor o presión en el pecho que es persistente o duradero
- un color azul en los labios, la cara o las uñas
- sentirse confundido o desorientado
- tener problemas para despertarse o permanecer despierto
Los síntomas de COVID-19 suelen aparecer en este orden
¿Cómo se trata el COVID-19?
Actualmente no hay tratamientos aprobados para tratar específicamente COVID-19. En cambio, el tratamiento se centra en controlar los síntomas a medida que se recupera.
Si tiene un caso leve, puede hacer lo siguiente en casa:
- Considere tomar medicamentos de venta libre como acetaminofén (Tylenol), ibuprofeno (Advil, Motrin) y naproxeno (Aleve) para ayudar a aliviar los dolores y molestias.
- Beba mucha agua para evitar la deshidratación.
- Descanse para ayudar a su sistema inmunológico a combatir el virus.
En las personas con enfermedades más graves, el tratamiento también se centra en el manejo de los síntomas y puede incluir:
- terapia de oxigeno
- antibióticos para tratar la neumonía bacteriana secundaria
- Ventilacion mecanica
En algunos casos, los médicos pueden usar tratamientos experimentales para ayudar a tratar a las personas que han sido hospitalizadas por COVID-19. Algunos ejemplos de estos incluyen:
- corticosteroides para ayudar a reducir la inflamación, como dexametasona o prednisona
- medicamentos antivirales, como remdesivir
- transfusiones de plasma de convalecencia
¿Cuál es la perspectiva para las personas que tienen o han tenido COVID-19?
La mayoría de los casos de COVID-19 son leves y pueden tratarse controlando sus síntomas en el hogar con reposo y medicamentos de venta libre. Las personas con un caso leve de COVID-19 generalmente pueden comenzar a sentirse mejor en 1 o 2 semanas.
Según la OMS, aproximadamente 1 de cada 5 personas con COVID-19 se enferma gravemente, lo que a menudo requiere hospitalización. En estos casos, el período de recuperación puede ser de 6 semanas o más.
Los investigadores estiman que alrededor del 1 por ciento de las personas que desarrollan COVID-19 mueren a causa de la enfermedad. Sin embargo, esto puede variar según la ubicación y la población específica que se esté estudiando.
COVID-19 puede tener efectos a largo plazo. Algunos de estos incluyen:
- fatiga persistente
- dificultad para respirar
- daño a los pulmones, corazón o riñones
Aún no se conoce el porcentaje exacto de personas que experimentan efectos duraderos de COVID-19.
La línea de fondo
COVID-19 puede causar un dolor de cabeza de moderado a intenso que puede ser similar a un ataque de migraña. Este dolor de cabeza a menudo ocurre en ambos lados de la cabeza, tiene un dolor opresivo o pulsátil y empeora con la actividad física.
Las personas que tienen migraña pueden notar que un dolor de cabeza por COVID-19 es diferente del ataque de migraña que suelen experimentar. En estas personas, es posible que el dolor de cabeza por COVID-19 no se presente con otros síntomas de migraña y que no responda a algunos medicamentos.
Actualmente no hay evidencia de que tener migraña lo ponga en riesgo de contraer COVID-19 o de desarrollar una enfermedad grave por COVID-19. Además, puede seguir tomando sus medicamentos para la migraña durante la pandemia.
Si bien la mayoría de los casos de COVID-19 se pueden tratar en casa, algunos casos son más graves. Busque atención de emergencia si tiene COVID-19 y tiene síntomas como dificultad para respirar, dolor de pecho o confusión.