Visión general
La ansiedad es una condición de salud mental que puede causar sentimientos de preocupación, miedo o tensión. Para algunas personas, la ansiedad también puede causar ataques de pánico y síntomas físicos extremos, como dolor en el pecho.
Los trastornos de ansiedad son increíblemente comunes. Afectan a unos 40 millones de personas en los Estados Unidos, según la Asociación de Ansiedad y Depresión de Estados Unidos.
Las causas de la ansiedad y los trastornos de ansiedad pueden ser complicadas. Es probable que una combinación de factores, incluidas las razones genéticas y ambientales, influya. Sin embargo, está claro que algunos eventos, emociones o experiencias pueden hacer que comiencen los síntomas de ansiedad o pueden empeorarlos. Estos elementos se denominan desencadenantes.
Los desencadenantes de ansiedad pueden ser diferentes para cada persona, pero muchos desencadenantes son comunes entre las personas con estas afecciones. La mayoría de las personas descubren que tienen varios factores desencadenantes. Pero para algunas personas, los ataques de ansiedad pueden desencadenarse sin ningún motivo.
Por esa razón, es importante descubrir cualquier desencadenante de ansiedad que pueda tener. Identificar sus factores desencadenantes es un paso importante para controlarlos. Siga leyendo para conocer estos desencadenantes de ansiedad y lo que puede hacer para controlarla.
Desencadenantes de ansiedad
1. Problemas de salud
Un diagnóstico de salud perturbador o difícil, como el cáncer o una enfermedad crónica, puede desencadenar ansiedad o empeorarla. Este tipo de desencadenante es muy poderoso por los sentimientos inmediatos y personales que produce.
Puede ayudar a reducir la ansiedad causada por problemas de salud siendo proactivo y comprometido con su médico. Hablar con un terapeuta también puede ser útil, ya que puede ayudarlo a aprender a manejar sus emociones en torno a su diagnóstico.
2. Medicamentos
Ciertos medicamentos recetados y de venta libre (OTC) pueden desencadenar síntomas de ansiedad. Esto se debe a que los ingredientes activos de estos medicamentos pueden provocarle malestar o malestar. Esos sentimientos pueden desencadenar una serie de eventos en su mente y cuerpo que pueden provocar síntomas adicionales de ansiedad.
Los medicamentos que pueden desencadenar ansiedad incluyen:
- pastillas anticonceptivas
- medicamentos para la tos y la congestión
- medicamentos para bajar de peso
Hable con su médico sobre cómo le hacen sentir estos medicamentos y busque una alternativa que no desencadene su ansiedad ni empeore sus síntomas.
3. Cafeína
Muchas personas dependen de su taza de café matutino para despertarse, pero en realidad podría desencadenar o empeorar la ansiedad. Según un estudio de 2010, las personas con trastorno de pánico y trastorno de ansiedad social son especialmente sensibles a los efectos inductores de ansiedad de la cafeína.
Trabaje para reducir su consumo de cafeína sustituyendo las opciones sin cafeína siempre que sea posible.
Aquí tienes una selección de té y café descafeinado para probar.
4. Saltarse las comidas
Cuando no come, su nivel de azúcar en sangre puede bajar. Eso puede provocar temblores en las manos y un rugido de estómago. También puede desencadenar ansiedad.
Comer alimentos balanceados es importante por muchas razones. Le proporciona energía y nutrientes importantes. Si no puede hacer tiempo para tres comidas al día, los refrigerios saludables son una excelente manera de prevenir la hipoglucemia, la sensación de nerviosismo o agitación y la ansiedad. Recuerde, la comida puede afectar su estado de ánimo.
5. Pensamiento negativo
Tu mente controla gran parte de tu cuerpo, y eso ciertamente es cierto con la ansiedad. Cuando está molesto o frustrado, las palabras que se dice a sí mismo pueden desencadenar mayores sentimientos de ansiedad.
Si tiendes a usar muchas palabras negativas cuando piensas en ti mismo, aprender a reenfocar tu lenguaje y tus sentimientos cuando comienzas por este camino es útil. Trabajar con un terapeuta puede ser increíblemente útil en este proceso.
6. Preocupaciones financieras
Las preocupaciones por ahorrar dinero o tener deudas pueden desencadenar ansiedad. Las facturas inesperadas o los temores al dinero también son factores desencadenantes.
Aprender a manejar este tipo de factores desencadenantes puede requerir la búsqueda de ayuda profesional, como de un asesor financiero. Sentir que tiene un acompañante y un guía en el proceso puede aliviar su preocupación.
7. Fiestas o eventos sociales
Si una habitación llena de extraños no suena divertido, no estás solo. Los eventos que requieren que hagas una pequeña charla o interactúes con personas que no conoces pueden desencadenar sentimientos de ansiedad, que pueden diagnosticarse como un trastorno de ansiedad social.
Para ayudar a aliviar sus preocupaciones o malestar, siempre puede llevar un acompañante cuando sea posible. Pero también es importante trabajar con un profesional para encontrar mecanismos de afrontamiento que hagan que estos eventos sean más manejables a largo plazo.
8. Conflicto
Problemas de relación, discusiones, desacuerdos: todos estos conflictos pueden desencadenar o empeorar la ansiedad. Si el conflicto lo desencadena particularmente, es posible que deba aprender estrategias de resolución de conflictos. Además, hable con un terapeuta u otro experto en salud mental para aprender a manejar los sentimientos que causan estos conflictos.
9. Estrés
Los factores estresantes diarios, como los atascos de tráfico o perder el tren, pueden causar ansiedad a cualquiera. Pero el estrés crónico o a largo plazo puede provocar ansiedad a largo plazo y empeoramiento de los síntomas, así como otros problemas de salud.
El estrés también puede llevar a comportamientos como saltarse comidas, beber alcohol o no dormir lo suficiente. Estos factores también pueden desencadenar o empeorar la ansiedad.
Tratar y prevenir el estrés a menudo requiere aprender mecanismos de afrontamiento. Un terapeuta o consejero puede ayudarlo a aprender a reconocer sus fuentes de estrés y manejarlas cuando se vuelvan abrumadoras o problemáticas.
10. Actuaciones o eventos públicos
Hablar en público, hablar frente a su jefe, presentarse en una competencia o incluso simplemente leer en voz alta es un desencadenante común de ansiedad. Si su trabajo o pasatiempos lo requieren, su médico o terapeuta puede trabajar con usted para aprender formas de sentirse más cómodo en estos entornos.
Además, los refuerzos positivos de amigos y colegas pueden ayudarlo a sentirse más cómodo y seguro.
11. Desencadenantes personales
Estos desencadenantes pueden ser difíciles de identificar, pero un especialista en salud mental está capacitado para ayudarlo a identificarlos. Estos pueden comenzar con un olor, un lugar o incluso una canción. Los desencadenantes personales le recuerdan, consciente o inconscientemente, un mal recuerdo o un evento traumático en su vida. Las personas con trastorno de estrés postraumático (PTSD) con frecuencia experimentan desencadenantes de ansiedad a partir de desencadenantes ambientales.
Identificar los factores desencadenantes personales puede llevar tiempo, pero es importante para que pueda aprender a superarlos.
Consejos para identificar los factores desencadenantes
Si puede identificar y comprender sus factores desencadenantes, puede trabajar para evitarlos y afrontarlos. Puede aprender estrategias de afrontamiento específicas para manejar los factores desencadenantes cuando sucedan.
A continuación, se ofrecen tres consejos para identificar los desencadenantes:
- Empiece un diario. Anote cuándo se nota su ansiedad y registre lo que cree que pudo haber provocado el desencadenante. Algunas aplicaciones también pueden ayudarlo a rastrear su ansiedad.
- Trabaja con un terapeuta. Algunos desencadenantes de ansiedad pueden ser difíciles de identificar, pero un especialista en salud mental tiene una capacitación que puede ayudarlo. Pueden usar terapia de conversación, llevar un diario u otros métodos para encontrar los desencadenantes.
- Se honesto contigo mismo. La ansiedad puede provocar pensamientos negativos y una autoevaluación deficiente. Esto puede dificultar la identificación de los desencadenantes debido a las reacciones de ansiedad. Sea paciente consigo mismo y esté dispuesto a explorar cosas de su pasado para identificar cómo pueden afectarlo hoy.
Síntomas de ansiedad
Los síntomas más comunes de ansiedad incluyen:
- preocupación incontrolable
- miedo
- tension muscular
- un latido rápido
- dificultad para dormir o insomnio
- dificultad para concentrarse
- malestar físico
- hormigueo
- inquietud
- sintiéndose al borde
- irritabilidad
Si experimenta estos síntomas con regularidad durante seis meses o más, es posible que tenga un trastorno de ansiedad generalizada (TAG). También existen otros tipos de trastornos de ansiedad. Los síntomas de estos pueden ser diferentes a los del TAG. Por ejemplo, con el trastorno de pánico puede experimentar:
- latidos cardíacos rápidos o palpitaciones
- transpiración
- temblor
- sacudida
- sentir como si tu garganta se estuviera cerrando
Buscando ayuda
Si cree que se preocupa demasiado o sospecha que tiene un trastorno de ansiedad, es hora de buscar ayuda. A menudo, es difícil reconocer la ansiedad porque los síntomas se vuelven comunes con el tiempo.
La ansiedad ocasional es común, pero los sentimientos crónicos de preocupación, miedo o pavor no lo son. Son una señal de que debe buscar ayuda profesional.
Inicie la discusión hablando con su médico. Hablarán de sus síntomas, realizarán un historial médico y realizarán un examen físico. También querrán descartar cualquier posible problema físico que pueda estar causando los problemas.
A partir de ahí, su médico puede optar por tratarlo con medicamentos. También pueden derivarlo a un especialista en salud mental, como un psicólogo o psiquiatra. Estos médicos pueden usar una combinación de psicoterapia y medicamentos para tratar la ansiedad y prevenir los desencadenantes.
Quitar
La ansiedad ocasional es común, pero los sentimientos crónicos de preocupación, miedo o pavor no son comunes. Son una señal de que debe buscar ayuda profesional. La buena noticia es que la ansiedad es una condición de salud mental altamente tratable. Sin embargo, muchas personas con ansiedad no buscan tratamiento.
Si su ansiedad está impidiendo su vida diaria, debe buscar ayuda. Un especialista en salud mental puede ayudarlo a encontrar un plan de tratamiento que alivie sus síntomas y lo ayude a sobrellevar sus desencadenantes de ansiedad.